Podemos entender como palabras anónimas a todos aquellos textos que no tienen autor conocido o aquellos textos que en forma intencional son declarados como textos anónimos por sus autores.
Entre las palabras o textos anónimos podemos contar:
- Algunas historias
- Algunas novelas
- Códigos
- Cuentos antiguos
- Guías de servicio
- Instructivos
- Leyes
- Poemas etc.
Ejemplos de palabras anónimas:
EL CAMELLO ATADO:
Una caravana que iba por el desierto se detuvo cuando empezaba a caer la noche.
Un muchacho, encargado de atar a los camellos, se dirigió al guía y le dijo:
-Señor, tenemos un problema. Hay que atar a veinte camellos y sólo tengo diecinueve cuerdas. ¿Qué hago?
-Bueno -dijo el guía-, en realidad los camellos no son muy lúcidos. Ve donde está el camello sin cuerda y haz como que lo atas. Él se va a creer que lo estás atando y se va a quedar quieto.
El muchacho así lo hizo. A la mañana siguiente, cuando la caravana se puso en marcha, todos los camellos avanzaron en fila. Todos menos uno.
-Señor, hay un camello que no sigue a la caravana.
-¿Es el que no ataste ayer porque no tenías soga?
-Sí ¿cómo lo sabe?
-No importa. Ve y haz como que lo desatas, si no va a creer que siguen atado. Y si lo sigue creyendo no caminará.
Autor: Anónimo.
Este cuento ilustra de qué forma los límites no los impone la realidad, sino nuestras propias creencias. Somos como el camello, atados sin cuerda a nuestra mente.
Se desconoce el autor.